Estar en pareja

MARTES DE TERAPIA 

“Estar en pareja”  por la Mag. Roberta Gorischnik, Directora del IPPL 

Estar en pareja es tanto fuente de gratificación como de sufrimiento, el otro nos da algo del orden de lo que nos falta o completa. Al menos esa es la ilusión por la que estamos o deseamos estar con el/ella.

Sin embargo asumimos que este príncipe azul, o princesa de nuestros sueños dista bastante de cómo la imaginamos desde que empezamos a soñar despiertos con el amor y
el dueño o dueña de nuestros corazones.

De nuestra capacidad de aceptar la des-ilusión, asumiendo nuestras propias limitaciones y no exigiéndole al otro, lo que no puede, superando la herida que significa que el no es
como lo pienso… que no me entiende… que no lo entiendo, seguramente podremos hacer algo con ello.

En toda relación amorosa hay luchas permanentes de poder respecto de las acciones que involucran a ambos –desde ir al cine hasta con qué valores educar a los hijos y maneras diferentes de entender y pensar (¿Cómo son las cosas?).

Esta desilusión (herida narcisística) lleva muchas veces a situaciones de violencia, que pueden ser tanto físicas como verbales. Varían también en los niveles de intensidad que se pueden presentar desde una franca explosión manifiesta o en una actitud constante insidiosa y desapercibida.

Existen situaciones de violencia manifiesta y fácilmente identificables, pero también hay otras sutiles, encubiertas en el vínculo de pareja.
Dado que el concepto de si mismo es uno de los ejes importantes en la relación, la autoestima esta muy vinculada a ella, presentándose de diferentes maneras de acuerdo a las
características psicológicas de sus integrantes pasando por lugares que van desde el extremo en el que el yo, en uno de los miembros de la pareja se somete y diluye en el partenaire del que se depende patológicamente, hasta el extremo opuesto en que el yo puede ser controlador en exceso coartando las posibilidades de espacios propios.

Ambas luchas derivan en mucho de lo narcisístico que en la relación se juega. En efecto, en un vínculo amoroso debe considerarse un equilibrio Yo-otro y es en este sentido en que
intervenimos quienes trabajamos en terapia de parejas. Cuya indicación se realiza cuando el sufrimiento es a causa del vinculo.Cuando no se puede estar con el otro pero tampoco
se puede estar sin él, lo que genera un circulo vicioso que o bien paraliza, desvitaliza, enferma o por el contrario desencadena situaciones de furia o descontrol.

En estos “Los tiempos del Covid-19” nos enfrentamos a situaciones nuevas, diferentes. La cotidianeidad es desconocida y con ella algunos aspectos propios y del otro. En este encuentro/desencuentro surgen lo más cercano, común, compartido como aquello que nos aleja, enoja, diferencia.
Para hacerle frente el amor y sus derroteros se las tendrán que ver con la impotencia o la creatividad.

Roberta Gorischnik
Licenciada en Psicología
Magister en Familia y Pareja