Los sueños ¿En cuarentena?
MARTES DE TERAPIA
“Los sueños ¿En cuarentena?” por la Lic. y Prof. Lucía Remiro, parte del equipo del IPPL
En sus intentos por demostrar la existencia de lo que Freud llamó “el inconsciente” (descubrimiento fundamental de su teoría) los sueños fueron una de las “pistas” más apropiadas para llegar a su conocimiento.
Los sueños siempre han intrigado a la humanidad. Si bien en la antigüedad se los consideraba útiles para conocer o predecir el futuro (donde se buscaba revelar un mensaje divino), con la llegada del psicoanálisis se empezó a pensar en los sueños como el cumplimiento inconsciente de un deseo. ¿Qué quiere decir esto? Que mientras dormimos, nos permitimos cumplir deseos que no nos permitiríamos estando despiertos, es decir, que no siempre son coincidentes con lo que deseamos de forma consciente; y ese comportamiento, si bien no es real, es sumamente vívido, pudiendo su contenido angustiarnos o divertirnos, ya que muchos de ellos nos parecen enormemente realistas, mientras que en otras ocasiones pueden parecernos completamente absurdos e imposibles. Es por esto que Freud pensó que debían tener una gran importancia en nuestra vida psíquica dado el gran efecto que producen para nosotros.
Ahora bien, ¿qué pasa con ellos en estos días que estamos viviendo?
Soñamos lo que vivimos, y si pensamos que nuestras emociones influyen en lo que soñamos, podemos pensar que estamos ante una etapa que nos genera más de una emoción.
Escuchamos a pacientes que nos mencionan con sorpresa la rareza o extrañeza de sus sueños, o que incluso registran que sueñan con mayor frecuencia que antes, siendo algunos de ellos angustiantes. Entonces nuestros sueños ¿también están en cuarentena?
Aunque nos encontremos en momentos donde pasamos mayormente nuestros días en casa, cuidándonos los unos a los otros, y restringiendo nuestro contacto físico con las demás personas, nuestra vida psíquica no se detiene.
Hoy las personas se sienten más habilitadas a expresar sus sentimientos, porque sabemos que el resto de las personas están atravesando lo mismo que nosotros. Si pensamos que durante el día estamos constantemente recibiendo y procesando información acerca del virus y sus consecuencias, es esperable que estos pensamientos estén presentes también durante la noche, cuando dormimos. Estados como la ansiedad o la incertidumbre, que nos mantienen en una inquietud interna constante pueden alterar nuestro sueño, ya que parte de este tiene que ver con situaciones que vivimos durante el día (lo que Freud llama “resto diurno”), entonces preocupaciones tales como salud, familia y/o trabajo son estímulos que pueden contribuir a que nuestra vida onírica este más activa que antes.
¿Qué quieren decir estos sueños?
Podemos pensar a los sueños como un reflejo del contexto que estamos atravesando, y pueden ser una herramienta más para pensarnos, y escucharnos. No es posible generalizarlos cuando pensamos en su interpretación, ya que cada sueño es único, y está relacionado con la subjetividad y vida particular de cada persona. Su interpretación solo será posible dentro de un espacio terapéutico o análisis, donde el papel del analista será acompañar al paciente en la lectura de dicho sueño, siendo este un lugar que nos permitirá conocernos, conocer qué nos pasa y cómo elaborarlo.
Lucía Remiro
Licenciada y Profesora en Psicología